LAS 4 ESTACIONES (III)




“¡Pánico! Ahí viene otra vez… ¿Recuerdas? Esa repentina sensación de miedo. Miedo abrumador. Cavando su camino bajo mi cerebro,… haciéndose un hogar, anidando,… ¡gritando en mi mente!” Elliot Alderson, (Mr. Robot, cap. 2x03).

Si te has decidido a dar respuesta, desde la Zona de Aprendizaje, a la pregunta “¿Hay más?, ¿Hay más?, ¿Hay más?,…”, pues agárrate que vienen curvas, repechos,… y frío. Siguiente estación: ¡Zona de Pánico!

Zona de Pánico: desconfianza, extrañeza,  dudas,  prejuicios, ofuscaciones, creencias, pensamientos y emociones limitantes, temores, miedos,… serán los compañeros de viaje… Para un servidor, la Zona de verdadero Entrenamiento y Acción y, salta a la vista, no suele ser agradable. Pero,… pero,… pero…. Nos recuerda E. Roosevelt: Usted gana fuerza, valor y confianza con cada experiencia en  la cual usted se detiene y mira al miedo a la cara. Ya que después de esto usted es capaz de decirse a sí mismo: ‘He superado este terror. Ahora puedo enfrentarme a lo  próximo que se me venga’."

Un proceso de coaching configurado de manera profesional te asistirá en este viaje, en tu decisión; será un acompañamiento adecuado a tus características y tus necesidades emocionales e intelectuales, para ir a donde te has propuesto, alcanzar tu meta, conseguir tu objetivo.

(A partir de ahora, el pronombre reflexivo “te” lo cambiaré por el de “me”. Es una forma de personalizar mi miedo, para encararlo directamente y explicar lo que se suele sentir.)

En la Zona de Pánico, me encuentro sin experiencia, y eso me da miedo. Aquí me enfrento a cambios profundos, y eso también me da miedo; pero el cambio también es transformación, evolución y progreso. Entonces, ¿miedo a qué? A no estar a la altura, a quedarme solo, a que me abandonen, a que me rechacen,… y a un número considerable de creencias que me provocan parálisis, bloqueo, o incluso evadirme del reto, evitar cruzar el espacio que me conduce a mi objetivo.

Me reía yo hace poco (me reía, sí,… pero de “canguele”) cuando una de mis preparadoras, Zoraida Rodríguez, psicóloga y coach en Granada, me recordaba: “Hazlo!!!,… y si tienes miedo, pues lo haces con miedo!!!”. A colación de esto, recordé un par de conceptos a tener en cuenta en la Zona de Pánico: la Tensión Emocional y  la Tensión Creativa

Mientras estoy cruzando estos terrenos desconocidos hay que tener en cuenta que la Tensión Emocional va a tender a hacerme retroceder, regresar corriendo a mi zona de confort para volverme a sentir protegido (“¡Papá, sujeta la bici por detrás que casi me caigo cuando me has soltado!”),… De ahí, la gran importancia que tiene trabajarme mis emociones, reconocerlas, aceptarlas, permitir que sean mis compañeras de viaje, pero para convertirlas en motor de cambio; no para hacerme dar un paso atrás sino para utilizarlas como impulso. Y si retrocedo, pues lo hago, intentaré no reprocharme nada (esto se puede convertir para mí en una doble agotadora lucha). Estoy aprendiendo, soy humano, el miedo también a equivocarme resulta letal para mí, para mi viaje. Mis emociones limitantes, en este momento, han tenido más fuerza que yo y debo encararlas, afrontarlas. Recuerdo que en mi Zona de Confort y de Aprendizaje adquirí unas herramientas, así es que también puedo aprovechar y hacer una pequeña visita para ver qué puedo hacer con ellas y volver al camino del afrontamiento de mis emociones negativas. Y eso sólo se consigue entrenándome con ellas, que es cuando respondo a la Tensión Creativa, esa fuerza que me impulsa hacia mi meta, la que hace que encuentre recursos para lograrlo, la que me convierte en un “McGyver” en acción hallando soluciones, pequeñas y efectivas estrategias en  mis formas de hacer y seguir adelante. Las consecuencias de dejarme llevar por la fuerza de la Tensión Creativa son que mi autoestima crece, mi motivación se vigoriza, que mis creencias limitantes se resquebrajan,… es una experiencia de toma de conciencia sobre mis valores y mis habilidades en acción, desarrollo y crecimiento. Siento cómo mi autoconfianza aumenta y ya no veo tan lejano el objetivo que me propuse. La pregunta “¿para qué quiero conseguir este objetivo?” empieza realmente a cobrar verdadero sentido para mí y la esclarezco.

(Ahora del “te”, pasaré al “nos”)

La Zona de Pánico es aterradora y he querido compartirla contigo,… Sí, pero aprovechándola con conciencia, paciencia y tesón habremos descubierto el Diamante que somos y siempre hemos sido,… nos hemos deshecho de todas las capas de inseguridades, desconfianzas y miedos que lo recubrían… Ahora brillamos, resplandecemos y relumbramos…

Ups!!!,… sin darme cuenta nos hemos introducido en la Zona Mágica camino de nuestra meta. Pero esto lo dejaré para mi próximo Blog.

Comentarios

  1. Buena entrada, Antonio. Muy cierto lo que cuentas! Y como digo yo: ACTUA a pesar del miedo: http://zoraidarodriguezvilchez.es/articulos/psicologia-deportiva/42-26-articulo3-aunque-tengas-miedo-hazlo-ideal-09-10-2012

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  2. Sí, me gustan mucho estos posts. Destacaría en este lo que indicas sobre la tensión creativa. Adelante!

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